El destete precoz es una práctica especialmente útil en años secos, que permite una mejor recuperación del estado corporal de las vacas y garantiza mantener los índices de preñez del rodeo.
Matias Aba
El principal objetivo destete precoz es el de mejorar el porcentaje de preñez de un rodeo. Con la supresión de la lactancia, todo el alimento que consume la vaca se destina a mejorar su estado corporal. También logra el levantamiento del bloqueo hormonal que produce el amamantamiento del ternero, permitiendo que las vacas reanuden su ciclo reproductivo. Esta técnica mejora el porcentaje de preñez, independientemente de la condición corporal de las madres. El mayor impacto se logra en animales con condición corporal baja.
Con el destete precoz, al separar los terneros a los 2 meses de edad, se reduce violentamente el período en el cual la vaca produce leche (de 6 meses a 2 meses). Así se adelanta el secado de la vaca y disminuyen sus necesidades nutricionales, pudiendo recuperar peso y estado corporal rápidamente. Esta situación le permite a la vaca reiniciar su actividad sexual, logrando mantener los índices de preñez del rodeo. El destete precoz es una herramienta importante en el manejo reproductivo de los vientres bovinos en épocas de restricción aguda de lluvias y pastos.
Momento justo
Convencionalmente, a los efectos prácticos, se sugiere destetar terneros, mínimo a los 60 días de vida y con un peso base de 70kg. Momento a partir del cual el rumen está apto para consumir un volumen suficiente de forraje y suplemento. Una vez que los terneros son separados de la madre, las vacas demoran entre 15 a 20 días en volver a presentar celo. Como conclusión, es recomendable hacerlo al menos 30 días antes de la finalización del entore.
Con esta herramienta se busca que las vacas estén el menor tiempo posible amamantando, acortando así el anestro posparto, favoreciéndola sin perjudicar al ternero.
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Manejo del destete precoz
Una vez destetados los terneros, es momento de decidir si salen del campo (venta) o si son recriados hasta que adquieran el peso objetivo de la producción. La decisión fundamentalmente se basará en las posibilidades de mantenerlos en el establecimiento con suplementación, teniendo en cuenta la relación costo/beneficio. Los terneros destetados que se recrían, tienen que quedar encerrados a corral para aprender a comer alimentos sólidos, ya que vienen de una dieta líquida (leche) y deben acostumbrarse a una dieta sólida (pasto /grano /balanceado).
Se realiza en 2 etapas, una a corral y otra a campo.
Primera etapa:
esta etapa tiene una duración aproximada de 10 días, en el que el ternero debe olvidarse de la madre y aprender a comer ración. Se deben armar lotes de no más de 100 animales y parejos en función al peso, con no más de 30 kilos de diferencia en el peso individual por lote. Una vez seleccionados, estos son llevados con sus madres al corral, dejando los terneros encerrados y sacando las vacas al campo para ser manejadas como vientres secos y tratarlas según el objetivo (servicio, inseminación artificial, engorde, venta, etc.).
Para asegurarse el menor estrés posible del ternero y su rápida adaptación a su nueva rutina alimentaria, es necesario realizar el destete a corral. Hay que mantener a los terneros por lo menos unos 5 días y no más de 15 dentro del corral. Ese tiempo que pasan los terneros en el corral tiene por objetivo tranquilizarlos para que dejen de buscar a las madres, y ante todo aprendan a tomar rápidamente la ración. Al ser el alimento balanceado la única fuente de alimentación en el corral, los terneros se ven obligados por el hambre a un pronto consumo.
Es recomendable que el corral tenga un tamaño mínimo de 10m² por ternero y en lo posible sin pasto, para que el ternero no destine energías en buscar pasturas, sino que se enfoque en la ración ofrecida aprendiendo a comer lo antes posible. Un factor fundamental a tener en cuenta es que el corral provea una zona de sombra y una buena calidad de agua, con un mínimo de 5 litros diarios por animal. También debe haber, en lo posible, alguna protección contra el viento, y comederos despegados a 30 cm del suelo y con un mínimo de 30 cm de frente por ternero. Para la disposición de los comederos, se recomienda el tipo lineal, con una distancia de entre 30 y 40cm por ternero.
Para facilitar la aceptación del alimento se recomienda el ayuno del primer día, proveyendo únicamente agua. A partir del segundo día se le ofrecen 100 gramos de ración por animal, observando si hay rechazo. El monitoreo periódico para identificar animales que no comen o enfermos es fundamental para evitar pérdidas. Al tercer día se incrementa el suplemento en 100 gramos diarios hasta lograr un consumo de 1kg de ración por ternero por día. Es una práctica habitual ofrecer el alimento repartido en la mañana y en la tarde, con una ración específica para destete precoz con un mínimo de 18% de proteína cruda y bajo contenido de fibra.
Segunda etapa:
Luego que los terneros aprendieron a comer, se continúa con el plan de alimentación, hasta que los terneros logren un peso de 110 a 120 kilos. Llegado a ese kilo a los 45/60 días de iniciado el programa de destete se podrá definir si siguen a campo o a corral la etapa de recría. El destete precoz se considera finalizado cuando el ternero alcanza los 110 kg. de peso vivo.
Plan sanitario
En cuanto a lo sanitario, es importantísimo que se tomen todos los recaudos posibles para que el ternero levante defensas rápidamente. La separación de la madre, representa para los terneros, unos de los momentos de mayor estrés en su vida productiva, sin contar que el sistema inmunitario sigue siendo inmaduro. Es fundamental definir un plan sanitario que ayude a prevenir problemas infecciosos.
Es recomendable comenzar con la vacunación al pie de la madre, 20 días previos al destete de forma de realizar la revacunación al momento del destete. Dentro de las enfermedades a prevenir, se destacan las clostridiosis, queratoconjuntivitis y las neumonías. También se puede asociar la dosificación con un antiparasitario.
Por: Matías Aba, médico veterinario y técnico comercial de Primia